Audi

Tiene un Audi R8, se harta y se compra un Citroën C5: “Duermo más tranquilo”

Marcos Palacios asegura que tener un coche de alta gama no es tan bonito como parece
a217488-medium-1633596863
a217488-medium-1633596863

En el mundo de los coches de alta gama, uno podría pensar que poseer un vehículo deseado por muchos es el sueño hecho realidad. Sin embargo, Marcos Palacios, propietario de un impresionante Audi R8, ha sorprendido a muchos al adquirir recientemente un Citroen C5. ¿Por qué alguien que ya posee un R8 se compraría un coche aparentemente menos lujoso? Marcos nos cuenta su razonamiento.

Según Marcos, tener un coche de alta gama no es tan idílico como parece. Antes de su Audi R8, él disfrutaba de un Audi A7, considerado uno de los mejores modelos de la marca. Sin embargo, la realidad de poseer un coche de este calibre resultó ser bastante tediosa. Marcos explica: "No solo debes tener el dinero suficiente para comprarlo y mantenerlo en las mejores condiciones posibles, sino que también debes estar preparado para los gastos de mantenimiento. Por ejemplo, cuando la caja de cambios de mi A7 falló, tuve que gastar 7.000 euros en reparaciones".

@m.palacios99 Mamita los 1100km con un depósito se reciben con los brazos abiertos #crazy #learnontiktok #newcar #daily #supercar #hypercar #dailyvlog #storytime #citroen ♬ Tokyo Drift - Xavier Wulf

El problema no solo radica en el aspecto financiero, sino también en los contratiempos que surgen. Marcos compartió su experiencia: "Si tienes un Audi R8, querrás conducirlo y disfrutarlo. Pero cuando surge un problema, debes llevarlo a un taller especializado, que puede estar a varias horas de distancia de tu hogar, y terminas sin coche durante un mes". Marcos enfatiza que no culpa al taller, sino a Audi, asegurando que "fabrican coches de mierda que son menos fiables que una escopeta de feria".

El propietario del Audi no escatima en críticas hacia la marca. Teniendo en cuenta que es su segundo Audi, tiene experiencia de primera mano. Recuerda una anécdota de un viaje a Alicante con amigos en su A7, cuando la luz de la caja de cambios se encendió y surgieron otros problemas mecánicos. "¿Para esto tengo un coche de alta gama?", se pregunta Marcos decepcionado.

Además del precio y el mantenimiento, Marcos destaca otro inconveniente: la envidia de las personas. Según él, existen dos tipos de reacciones ante los coches de lujo. Está la minoría que admira y piensa "qué genial, ojalá pudiera tener uno", y luego está la mayoría, que siente resentimiento y opta por rayar el vehículo. Marcos relata cómo dejaba su coche estacionado en la calle y lo encontraba rayado. Como amante de los coches impecables, esta situación era desalentadora.

En cambio, con su Citroen C5, Marcos disfruta de una experiencia completamente distinta. El automóvil pasa desapercibido, nadie lo mira ni lo raya, y además resulta muy cómodo. Marcos duerme tranquilo sabiendo que su coche está seguro. También destaca la mejora en términos de mecánica. Cuando compró el Citroen, tuvo algunos problemas menores, pero los resolvió fácilmente con piezas de desguace, que resultaron ser mucho más económicas. Por ejemplo, los altavoces de su Audi costaban 1.000 euros, mientras que en el desguace encontró unos por solo 2 euros. Si bien admite que no suenan igual, el ahorro es evidente.

Sin duda, Marcos reconoce que el Audi es estéticamente más atractivo y que la experiencia de conducción no se compara. Sin embargo, en este momento, necesitaba un coche que le permitiera aparcarlo en la calle sin preocupaciones y despreocuparse de él en cierta medida.

La historia de Marcos nos recuerda que, en ocasiones, lo práctico y lo funcional superan la imagen y el prestigio. La elección de un coche va más allá de su apariencia exterior y puede estar impulsada por necesidades y preferencias personales. En última instancia, cada persona busca el equilibrio entre el disfrute de un vehículo y la comodidad que este brinda en su día a día.