Un BMW X6 que salió de un concesionario en Alemania ha acabado en un pueblo de 5.000 habitantes de Toledo. Este coche alemán que ha acabado en Carranque tiene varias peculiaridades, pero sobretodo tuvo una avería tremenda que se va a repetir con toda seguridad si no acude al taller oficial a repararlo. Se trata de un fallo endémico que BMW ha reconocido como suyo y ha llamado a los clientes para que acudan a su taller a repararlo. Pero el cliente se acaba de enterar de la bomba de relojería que tiene bajo su asiento.
Lo compró en julio. No tiene ni cuatro meses con él y ya se ha enterado de que tiene que ir al taller a cambiarle de todo. La buena noticia es que, en principio, es gratis dado que la marca lo cubre de forma íntegra. A este BMW X6 se le ha roto el árbol de transmisión, se ha empotrado contra la caja de cambios, la caja la ha destrozado, la soldado… Este problema lo cubría el fabricante alemán, pero no acudieron al concesionario oficial para llevar a cabo esta reparación.
“Estimado concesionario o taller autorizado: la cruceta del árbol de transmisión delantero se podrá desgastar de forma prematura, le rogamos que tome las medidas oportunas para que esto se compruebe y en caso necesario se sustituya el árbol de transmisión de los vehículos afectados durante la próxima estancia en el taller”, detallaba la campaña lanzada por BMW hace muchos años. El problema es que pese a que a este coche sí le cambiaron la transmisión, lo cierto es que le va a volver a fallar porque le pusieron exactamente la misma que tenía de origen, es decir, la defectuosa de fábrica.
“Tu árbol de transmisión se va a romper”, le ha advertido el propietario de GT Automoción, Ángel Gaitán, a este cliente llamado Mario. Pese a que en el compra-venta le advirtieron de que le habían cambiado el árbol de transmisión y la caja de cambios, lo cierto es que la reparación no fue la adecuada. El problema que presentaba de origen este árbol de transmisión es que tenía demasiada holgura, tanta que incluso podía reventar en pleno funcionamiento y reventar la caja de cambios, que tiene ubicada justo al lado. Solo el árbol de transmisión son unos 2.000 euros, teniendo en cuenta el coste de la pieza, el IVA y la mano de obra. Pero esto no es lo único que tiene el BMW.
Hay otra campaña presente que obligaría a los clientes a acudir al taller oficial para no tener problemas. El airbag del piloto y el del copiloto también tienen que ser cambiados por unos nuevos por defectos de fábrica, otra campaña de BMW. El problema que hay en este punto es que, tal y como ya desvelamos en CHASIS CERO, el fabricante alemán no tiene stock de airbags suficientes, algo que ya ha reconocido abiertamente a los clientes que han acudido a sus instalaciones para llevar a cabo la campaña. El coste de cada airbag, en este caso, es de más de 1.000 euros cada uno, solo teniendo en cuenta la pieza y los impuestos.
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El cliente ahora tiene que llamar al compra-venta porque también desde ahí no fueron claros. Es cierto que le advirtieron de que le habían cambiado el árbol de transmisión y la caja de cambios, pero no es verdad, o al menos es una verdad a medias. El árbol fue sustituido por el mismo, por el defectuoso. Pero la caja de cambios no fue cambiada. Ángel Gaitán ha dejado claro que van a llamar al compra-venta para pedir explicaciones, pero lo que le toca a este cliente toledano es ir al taller oficial y esperar que tengan recambios.
