Hace 40 años, en 1984, Citroën lanzó la C15, una furgoneta derivada del turismo pequeño que la marca fabricara entonces, el AX. El modelo siguió el mismo patrón que hasta entonces habían tenido sus antecesores: coger el turismo pequeño que Citroën fabricara entonces y realizar una versión comercial.
La C15 medía 3,99 metros de largo, 1,63 de ancho y 1,8 de altura, contaba con una capacidad de carga de hasta 570 kg y su longitud de carga era de 1,64 metros. Entre sus virtudes, estaba un precio inferior al millón de pesetas (6.000 euros), un grado de confort muy superior a lo que ofrecía Renault, y una gama muy completa, con distintas posibilidades de motores y carrocerías.
Cuando llegó al mercado solo podía equipar un motor de gasolina de cuatro cilindros y 1,1 litros con 55 CV, que en 1989 fue renovado sin variar su potencia máxima. En 1992 se levantó el rendimiento de este propulsor hasta los 60 CV, gracias, entre otras cosas, a la incorporación de la inyección en lugar de la carburación. Y desde 1991 se podía también optar por un motor 1.4 con 75 CV.
Pero la C15 también contó desde 1986 con variantes diésel atmosféricas, equipadas al igual que la versión gasolina más potente con cambio de cinco velocidades. La primera de ellas equipaba un motor 1.8 que se quedaba en 60 CV.
A decir verdad, la C15 tenía que haber desaparecido con este motor como el más demandado. Pero la pequeña furgoneta fabricada en Vigo se resistió a desaparecer. De hecho, la Berlingo fue desarrollada como su sustituta, pero cuando apareció en 1996 se decidió que la C15 la complementara como una variante más económica y sencilla. Y así, como una furgoneta básica, todavía en el año 2000 recibió un nuevo motor diésel atmosférico de 1,9 litros y 69 CV.
El 5 de diciembre de 2005 se produjo el último modelo en la planta de Vigo. Se puede decir que no 'se murió', sino que, esta vez sí, 'la mataron' los dirigentes de Citroën. Y no por unanimidad, porque seguía teniendo muchos defensores, sino porque Citroën ya había desarrollado el Nemo (una especie de Berlingo en pequeño) y no se podía permitir que la eterna C15 le hiciera sombra.
21 años después de su lanzamiento se habían fabricado 1.181.471 unidades sin apenas cambios estéticos. Y, si las normas anticontaminación no lo impiden, todavía pasarán muchos más hasta que dejemos de verlas por nuestras calles.
Si estás pensando en comprar una Citroën C15, aquí tienes algunos consejos:
- Busca un modelo con el motor 1.4 de 75 CV. Es el más potente y también el más fiable.
- Evita los modelos con el motor 1.1 de 55 CV. Es el menos potente y también el más lento.
- Comprueba el estado de la carrocería. La C15 es una furgoneta muy resistente, pero la carrocería es susceptible de sufrir daños por golpes o arañazos.
- Asegúrate de que el interior está limpio y cuidado. La C15 es una furgoneta muy práctica, pero el interior puede sufrir mucho desgaste si no se mantiene limpio y cuidado.
La Citroën C15 es una leyenda del mundo del motor. Es una furgoneta que ha demostrado su dureza y fiabilidad durante más de dos décadas. Es un modelo que ha sido muy popular entre los profesionales y los particulares, y que todavía hoy se puede ver con frecuencia en nuestras calles.
