Que los coches de Jaguar Land Rover no son fiables es una afirmación que cada vez se repite más en los talleres. Incluso fuentes del propio fabricante británico lo reconocen abiertamente.
Sin embargo, hay algo que no se comenta tanto: por qué es tan caro reparar estos coches. Evidentemente, mucho tiene que ver que ellos se autodenominen como marca ‘premium’, razón por la que te cobran las piezas a un precio más que elevado.
Pero también hay problemas a nivel de ingeniería que hacen que cambiar un retén que vale poco más de 30 euros se vaya a más de tres cifras euros de reparación solo por la intensa mano de obra que requiere.
Vamos a hablar de un caso concreto que ha llegado a las puertas de del taller Fixcar de Valdemorillo. El cliente no había tenido lo que se dice una experiencia grata con Land Rover.
Compró un Discovery nuevo hace cuatro años y nada más sacarlo del taller se rompió el motor, tal y como cuentan desde el taller.
Le montaron otro en garantía y el cliente tiró con el coche hasta encontrarse nuevos sustos, entre los que está que en este motor “nuevo” había piezas de desguace.
Pero al margen de eso, que contaremos en otro artículo, lo cierto es que este propietario se vio obligado a ir a otro taller para ver por qué perdía aceite su coche.
La sorpresa llegó con la factura: la pieza a sustituir costaba poco más de 30 euros, pero cambiarla dispararía el precio de forma considerable.
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Todo depende del coste de la mano de obra y del tipo de aceite que se utilice, pero lo cierto es que para cambiar el retén de cigüeñal, el mecánico se ha visto obligado a desmontar medio coche.
La rueda, la cuna, el intercooler, el diferencial, el cambio, el convertidor de par… son algunas de las piezas que se han tenido que sacar para poder acceder a este retén tan barato.
A todo esto hay que añadirle, por supuesto, los aceites correspondientes de cada pieza para que todo funcione correctamente y tal y como recomienda el fabricante.
En el transcurso del proceso, se puede ver por qué Land Rover no es precisamente una marca fiable, tal y como cuentan desde Fixcar Valdemorillo.
En el motor hay demasiados componentes de plástico si se tiene en cuenta que hablamos de un coche premium que tenía un precio de partida superior a los 50.000 euros (y eso tirando por lo bajo).
Desde el taller van a redacta un informe para un cliente visiblemente enfadado con la marca por el hecho de no haber parado de tener problemas con su Land Rover Discovery nuevo.
No es un caso aislado, pero sí que ayuda a explicar por qué además de dar problemas de fiabilidad, las reparaciones de esta marca son especialmente caras.
Si tenemos en cuenta que las piezas son caras de por sí y lo sumamos a que el montaje y desmontaje del motor es realmente complejo e inaccesible, nos encontramos con una realidad que sacude día sí y día también a los propietarios de un Land Rover.
En este caso, afortunadamente no hablamos de cadena de distribución o de ruptura directa del motor (aunque el cliente ya lo ha sufrido). Hablamos de que por cambiar un retén se ha tenido que desmontar el coche y por el camino se ha visto que ese motor “nuevo” que le pusieron estaba montado con piezas de desguace.
El informe caerá entre los miles que golpean a la marca británica, donde reconocen que están teniendo problemas serios de fiabilidad por todos los lados. Solo queda ver cómo solucionarán este problema que viene derivado de la compra de Tata Motors.
