CUPRA

Un empleado de Cupra estalla y relata por qué los coches fallan tanto: "Estamos hasta los huevos"

Aseguran que sacan al mercado hasta 390 modelos por turno.
Ángel Gaitán y el propietario del Cupra
Ángel Gaitán y el propietario del Cupra

Algunos de los empleados de Seat y Cupra están hartos de las directrices de la compañía y de la forma de trabajar que se ha impuesto desde el fabricante. Las quejas han llegado hasta tal punto que ha habido algunos empleados de Seat y Cupra que han escrito emails al propietario de GT Automoción, Ángel Gaitán, para advertirle de los problemas que presenta la marca española y sobretodo para avisar de que habrá más porque el sistema de trabajo que se ha impuesto no es el mejor para evitar fallos de fábrica.

Son más de dos y más de tres emails que han llegado al correo de Ángel Gaitán, pero ha habido uno que le ha llamado especialmente la atención por ser de un empleado de una factoría de Cupra. No era la primera vez que le escribía. Todo vino a raíz de un vídeo publicado en las redes de Gaitán en el que un cliente se quejaba de una ingente cantidad de problemas en su Cupra recién comprado. Y el empleado sabía perfectamente por qué presentaba esas averías y a qué se debían.

Para este trabajador de Cupra, los problemas seguirán apareciendo. Y lo harán porque se está prescindiendo, según él detalla en el email, de personal en los puestos de calidad para intentar sacar la mayor cantidad de coches al mercado. El caso concreto del Cupra que acabó en las instalaciones de Gaitán pudo ser, según detalla, uno de los muchos modelos que estaba en las campas de Tarragona que se inundaron. Pero en cualquier caso, la parte más interesante es cuando habla de por qué hay tantos coches que presentan problemas (y presentarán) según son matriculados y puestos en circulación.

Este empleado insiste en que el mayor problema reside en que Seat y Cupra prescinde de personal en los puestos de calidad para centrarse en que la cadena de montaje funcione a todo tren. De hecho, el trabajados asegura que en la factoría sacan hasta 390 coches (entre Cupra León y Formentor) por turno, lo que supondría a sus ojos una auténtica exageración. Pero quizá lo más desolador es cuando advierte que habrán más fallos, algo que se empieza a ver entre algunos clientes que se aventuran a comprar un Cupra o un Seat recién salido de la factoría.

“Estamos hasta los huevos”, detalla visiblemente enfadado el empleado de Seat y Cupra. Ellos son los primeros que ven cómo repercute la falta de interés por solucionar los problemas mecánicos que tiene la marca.

EL CASO DEL CUPRA

“Me espero una demanda buena por parte de Cupra”. Así de contundente ha empezado el propietario de GT Automoción, Ángel Gaitán, a relatar la historia de David, un padre de familia que viene de Santander que se ha comprado un Cupra y se ha encontrado con un auténtico infierno mecánico y electrónico. “Falla todo”, ha comentado el propietario. Y no le falta razón. Lo cierto es que el vehículo que se ha comprado y que no tiene más de 3.000 kilómetros tiene tantos fallos que son difíciles de contabilizar. Desde el limpiaparabrisas, pasando por el techo solar a tener un consumo inconcebible de 25 litros a los 100 kilómetros.

Cupra no parece estar haciendo las cosas del todo bien siempre que se atienda a los relatos de este tipo de clientes. El coche está recién matriculado. Tiene concretamente poco más de 2.800 kilómetros y ya tiene más fallos que componentes electrónicos. Desde el mismo momento en el que se compró el vehículo vio que presentaba fallos. David fue previsor y contrató una garantía ampliada, pero la gran cantidad de averías que presenta el Cupra ha intimidado hasta a los propios mecánicos de la casa oficial.

“Es una estafa a nivel nacional”, ha asegurado Ángel Gaitán al conocer el relato de David. Por enumerar algunos de los fallos que presenta el Cupra, podemos empezar por el limpiaparabrisas, seguir por la caja de cambios y pasar por el sistema de precolisión. Pero no es lo único. El techo solar no funciona, tal y como ha podido demostrar el propietario del Cupra. Las ventanillas del coche tampoco funcionan correctamente. Las puertas del vehículo no se cierran… Y todo por decir algo. Pero quizá el mejor modo de resumir todo lo que adolece este vehículo es parafrasear a Ángel Gaitán. Para arreglarlo, literalmente tendría que fabricar el coche de nuevo. El Cupra está mal de fábrica, pero tal y como detalla el cliente, parece que los mecánicos del taller oficial no se han hecho cargo de las averías. De hecho, insisten en que el que las puertas no cierren es normal porque las ventanillas están abiertas.