Los SUV o todoterrenos, conocidos por su versatilidad y popularidad, han estado en el centro de la controversia últimamente. Este tipo de vehículos, que han ganado terreno en las ventas de automóviles en Europa, están atrayendo la atención de los ecologistas debido a su tamaño y peso. París es un ejemplo de ciudad que ya ha tomado medidas, como penalizar a estos vehículos por su ocupación de espacio al estacionar. Sin embargo, la propuesta de la eurodiputada francesa Karima Delli ha llevado la controversia un paso más allá.
Delli, una política ecologista que ha expresado su oposición a los SUV en el pasado, ha presentado una propuesta ante la Comisión Europea para crear un carnet de conducir específico que habilite a los conductores para manejar "todoterrenos pesados". Su argumento principal se basa en la creencia de que los SUV no solo ocupan más espacio, sino que también son menos eficientes en términos de consumo de combustible y emisiones. Además, argumenta que los SUV están involucrados en colisiones más graves en comparación con los automóviles ligeros.
La propuesta de Delli se centra en la creación de una categoría de carnet denominada "B+" que sería necesaria para operar SUV o todoterrenos pesados. Su idea implica la división de la licencia de conducir existente para crear esta nueva categoría. Los conductores solo podrían acceder a esta licencia después de adquirir un período mínimo de experiencia con el carnet de la categoría B. No obstante, Delli sugiere exenciones por motivos profesionales o de uso especial, así como para vehículos de emisiones cero.
La propuesta de Delli no se limita al carnet específico para SUV. También incluye otras sugerencias, como extender el sistema de puntos para las licencias de conducir a todos los países de la Unión Europea de forma obligatoria. Asimismo, plantea la posibilidad de imponer un período de dos años de tasa cero de alcohol a conductores novatos. Delli también aboga por establecer límites de velocidad máxima para este grupo de conductores, que se aplicarían en todos los países de la UE. Además, propone la implementación de un curso de reciclaje, sin necesidad de un nuevo examen, después de los primeros dos años de la licencia.
La propuesta de Delli ha generado una discusión intensa y polarizada. Mientras que algunos aplauden su enfoque en abordar las preocupaciones ambientales y de seguridad relacionadas con los SUV, otros argumentan que estas medidas podrían resultar excesivas y restrictivas. A medida que esta propuesta continúa siendo debatida y evaluada en la Comisión Europea, se espera que continúe generando controversia y debate en la comunidad automovilística y más allá.
