La Policía Nacional y la Guardia Civil han incorporado 177 Cupra a sus flotas, en una operación que supone la llegada de una nueva marca a los vehículos oficiales de los cuerpos de seguridad del Estado.
En concreto, la Policía Nacional ha recibido 65 unidades del Cupra León e-Hybrid, un híbrido enchufable de 204 caballos que ofrece una autonomía eléctrica de 61 kilómetros. Estos vehículos se destinarán a las unidades de coordinación policial, y su adquisición ha sido posible gracias al Plan Nacional de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado por la Unión Europea.
Por su parte, la Guardia Civil ha recibido 112 unidades del Cupra Formentor, el SUV deportivo de la marca española. Estos vehículos están propulsados por un motor diésel de 150 caballos y cuentan con un kit patrulla. Su adquisición ha sido financiada por el Ministerio del Interior.
La incorporación de estos nuevos vehículos supone un paso más en la modernización de las flotas de la Policía Nacional y la Guardia Civil, que están incorporando cada vez más modelos híbridos y eléctricos para reducir su impacto medioambiental.
En el caso de la Guardia Civil, la incorporación de las 58 furgonetas eléctricas Citroën E-Berlingo, que también se ha producido en este año, contribuye a reforzar esta apuesta por la sostenibilidad.
La incorporación de los Cupra a las flotas de la Policía Nacional y la Guardia Civil es una buena noticia para los cuerpos de seguridad, ya que se trata de vehículos modernos y eficientes que contribuirán a mejorar su operatividad.
En particular, los Cupra León e-Hybrid ofrecen una autonomía eléctrica suficiente para realizar desplazamientos urbanos y suburbanos, lo que permitirá a los agentes reducir su consumo de combustible y sus emisiones contaminantes.
Por su parte, los Cupra Formentor también son vehículos eficientes, ya que su motor diésel ofrece un consumo contenido. Además, su diseño y prestaciones los convierten en vehículos atractivos y capaces de cumplir con las necesidades de los cuerpos de seguridad.
