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Un cliente de Hyundai denuncia el calvario que ha sufrido con su coche nuevo: "Es una vergüenza, no se hacen cargo de nada"

El comprador ha tenido que llevar su vehículo al taller en numerosas ocasiones por fallos de todo tipo y el servicio posventa de la marca ha sido nefasto
Concesionario Hyundai
Concesionario Hyundai

Un usuario de Madrid ha denunciado a Hyundai por los continuos problemas que ha tenido su coche nuevo desde el momento en que lo compró. El comprador, que prefiere mantener su anonimato, relata que el vehículo le fue entregado con la bandeja del maletero doblada. Al reclamarlo en el concesionario, le dijeron que "era normal, que como el coche era nuevo tenía que ajustarse". Sin embargo, el problema persistió y la bandeja se empezó a doblar aún más. El usuario volvió a reclamarlo y, en esta ocasión, le dijeron que le arreglarían la bandeja en la próxima revisión, que debía realizarse a los 5.000 kilómetros. Algo que extrañó al protagonista de esta historia, ya que pensaba que la revisión se hacía a los 10.000 kilómetros.

Cuando llegó el momento de la revisión, el mecánico del taller oficial preguntó "por qué traía el coche a revisión, cuando debe ser a los 10.000 km". Además, aseguró que no podía arreglar la bandeja "porque estaba manipulada". El jefe de taller tuvo que venir con un metro para comprobar que el usuario tenía razón.

Este fue solo el comienzo de una larga lista de percances con Hyundai. El coche también empezó a dar fallos en otros aspectos electrónicos y del panel. El usuario volvió a reclamarlo al concesionario, pero le dijeron que esos fallos no entraban en la garantía.

Harto de la situación, este comprador llamó directamente a Hyundai España. La jefa de atención al cliente de la marca reconoció que el coche no debería haber ido a revisión tan pronto y le ofreció una revisión gratuita, además de arreglarle los fallos electrónicos.

Sin embargo, los problemas no acabaron ahí. Poco después, el coche empezó a dar fallos con el sistema start/stop y con la humedad en el interior de los faros delanteros y traseros. El start/stop se arregló, pero volvió a fallar a la semana. Y con los faros empañados, Hyundai reconoció el error y ordenó cambiarlos, ya que le estaba entrando agua.

A la siguiente revisión, el usuario volvió a reportar un problema. En esta ocasión, vibran los asientos. Pero es que pocos meses después, la caja de cambios también comienza a dar problemas. En un taller oficial de León reconocen que han salido algunos defectuosos y "les cuesta meter la primera y quinta marcha".

El taller avisa al usuario de que las piezas de la caja de cambios tardarán "un mes o más en llegar" y que no tienen coche de sustitución. Armándose de paciencia, nuestro protagonista llama de nuevo a Hyundai España para comunicar lo sucedido y encontrar una solución, ya que "yo no puedo estar un mes sin coche", asegura.

En esta ocasión, el tono de la conversación cambia. Hyundai le dice que no le puede poner un coche. A lo que el usuario responde que "él tampoco tiene la obligación de tener un coche nuevo constantemente en el taller". Ante la negativa de la marca, el usuario amenaza con poner una denuncia. Pocas horas después, la jefa de atención al cliente de Hyundai España vuelve a llamar para citarlo a la semana siguiente y cambiarle las piezas.

Sin embargo, al cabo de los días el asiento vuelve a 'claquetear'. El usuario vuelve a dejar el coche en el taller y cuando va a recogerlo le comunican que Hyundai no lo arregla debido a que el problema "es del uso".

A todo esto, el start/stop sigue sin funcionar. Ningún taller se lo soluciona. Al final, le reconocen que deberían haberle cambiado la batería y, además, solucionar el problema, pero que ya está fuera de garantía y no lo van a arreglar.

Como imaginarás, esta persona, harta de la situación, ha decidido iniciar los trámites legales para ir a juicio. "Es de risa, una vergüenza, no se hacen cargo de nada", lamenta.

Este caso es un ejemplo claro de la importancia de un buen servicio postventa. Un coche nuevo no debería dar tantos problemas y, cuando lo hace, el fabricante debe estar dispuesto a solucionarlos.

En este caso, Hyundai ha reconocido algunos de los fallos, pero no ha ofrecido una solución satisfactoria al usuario. El cliente se ha visto obligado a llevar el coche al taller en numerosas ocasiones y, en algunos casos, ha tenido que esperar semanas para que le solucionaran los problemas.

Es importante que los consumidores conozcan sus derechos y reclamen cuando tengan problemas con su coche. Si un fabricante no está dispuesto a solucionar los problemas de un coche nuevo, el consumidor puede iniciar los trámites legales para ir a juicio.