Volkswagen está adoptando medidas para reducir costos y está explorando posibles recortes de personal en Europa, lo que incluye la disminución de hasta un 20% de la fuerza laboral en sus oficinas administrativas en el continente. Las conversaciones entre la dirección y el comité de empresa apuntan hacia esta dirección, como parte de un programa más amplio de austeridad dentro del grupo automotriz alemán.
Son muchas las voces que aseguran que el Grupo Volkswagen tiene la intención de reestructurar su personal administrativo en Europa, buscando reducir significativamente el número de trabajadores en sus oficinas. Aunque la implementación de estos despidos no ocurrirá hasta 2026, aún no se ha especificado la cantidad exacta de empleados afectados ni se ha establecido un plazo concreto para tomar esta medida, enfocándose principalmente en la reducción de costos.
Actualmente, Volkswagen cuenta con casi 40.000 empleados en roles administrativos, que abarcan distintas marcas bajo su grupo, como Volkswagen, Skoda, Audi, Seat, Cupra y Porsche, aunque también hay otras marcas que derivan de este grupo a nivel de componentes como es el caso de Lamborghini.
Este esfuerzo por recortar gastos forma parte de un plan más amplio anunciado en junio por el fabricante alemán, que tiene como objetivo implementar medidas de ahorro y reducción de costos por un total de 10.000 millones de euros hasta 2026, con la meta de lograr un retorno sobre las ventas del 6,5%. Está previsto que las decisiones clave sobre estas medidas se concreten hacia finales del presente año.
Las acciones de reducción de costos también involucrarían la simplificación de la producción, la concentración en modelos de alto volumen y la optimización de la fabricación de vehículos de pasajeros en conjunto con las marcas Seat, Cupra y Skoda. A esto se suma la pausa temporal en las contrataciones de personal externo en seis de sus plantas en Alemania, que no son pocas.
Estos movimientos se dan en un contexto en el que Volkswagen ha experimentado una caída cercana al 5% en su beneficio operativo entre enero y septiembre, a pesar del aumento en la facturación del 16% en comparación con el mismo período del año anterior. La disminución del beneficio operativo se ha atribuido a factores como la cobertura de materias primas, interrupciones en la fabricación y mayores costos de los productos, lo que ha afectado particularmente al grupo de marcas generalistas que incluye Volkswagen, Skoda, Seat, Cupra y la división de vehículos comerciales.
