Peugeot, Citröen y otras marcas como Opel se encuentran enfrentando dificultades debido a posibles defectos de fábrica en sus motores, lo que ha generado serios inconvenientes para cientos de propietarios. En específico, nos referimos a la demanda colectiva en marcha contra Peugeot, principalmente por los motores Puretech que presentan problemas con la correa de distribución bañada en aceite. Sin embargo, es crucial ahondar en los casos individuales para comprender la magnitud de los desafíos.
Un cliente adquirió un Citröen C3 1.2 Puretech en junio de 2017 y rápidamente surgieron complicaciones. Desde la pérdida de aceite hasta una reducción en la potencia del vehículo y emisión de humo blanco por el tubo de escape, se notaban los problemas. Las visitas al taller no dieron resultados satisfactorios: se limitaron a rellenar el aceite sin proporcionar una explicación clara sobre la causa subyacente del problema.
Después de varias idas y vueltas al taller, se determinó que el vehículo necesitaba un cambio completo del motor. A pesar de que Peugeot se comprometió a cubrir el 50% del costo de la reparación, el cliente enfrentó una factura de 2.150 euros. Aunque significativa, esta cantidad resultó ser notablemente inferior en comparación con lo que habría costado en otras marcas.
La falta de detalles explícitos sobre la causa del problema y la necesidad de cambiar todo el motor dejaron al propietario insatisfecho. A pesar de que la garantía del Citröen había expirado, la obligación de reemplazar el motor con solo 90.000 kilómetros y cuatro años de antigüedad generó preocupación y molestia.
La investigación posterior reveló que muchos propietarios estaban lidiando con problemas similares con los motores 1.2 Puretech. Esta situación condujo a que el cliente y otros afectados decidieran unirse a una demanda colectiva contra Peugeot y otras marcas. El objetivo es buscar una compensación total por los costos de reparación o la sustitución del vehículo afectado por uno similar, pero libre de estos problemas.
LOS AFECTADOS: 400
El interés y apoyo hacia la demanda colectiva contra Peugeot por los motores con la correa bañada en aceite siguen en aumento. Un grupo decidido ha optado por enfrentarse al fabricante francés, y el número de afectados dispuestos a llevar el caso a los tribunales ha crecido notablemente. Los motores Puretech, señalados en este problema, sufren fallos graves, como la corrosión de la correa de distribución debido a la mezcla de gasolina con aceite, lo que puede llevar a su ruptura.
La cantidad de personas que buscan demandar a Peugeot ya supera las 400, y sumarse a esta iniciativa es tan sencillo como contactar a los organizadores mediante el correo electrónico: [email protected]. Los vehículos equipados con el motor Puretech están enfrentando dificultades derivadas de la corrosión de la correa de distribución a causa de la combinación de combustible y aceite. A pesar de las múltiples quejas y testimonios, Peugeot no ha mostrado interés en lanzar una campaña para solucionar estos problemas.
