Se entera de que el taller le ha cobrado 10 veces más de lo que vale un sensor de su Toyota

El intento de "estafa" no funcionó gracias a un amigo del afectado, que le cambió la pieza que fallaba en menos de media hora.
estafa sensor glp
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No siempre es sencillo encontrar un taller de confianza. Y es que en muchas ocasiones, los talleres mecánicos acaban dando más disgustos que alegrías. Especialmente, en el bolsillo de los propietarios de los coches, que se encuentran con facturas de lo más inesperadas y dolorosas.

Una factura que, sin embargo, en esta ocasión ha sido la razón por la que un amante del motor ha decidido publicar su enfado con su taller. Y es que, para un arreglo de apenas 90 euros, su supuesto taller de confianza no dudaba en presupuestarle más de 800 euros.

"No suelo hacer estas cosas, pero voy a hacer una recomendación negativa de un taller", explica Javier Costas en su cuenta de Twitter.

Y no puede ser más sincero con respecto al motivo que le lleva a señalar al taller de Coslada: "Pretender estafarme".

Un presupuesto que multiplica por 10 el verdadero coste de reparación

Así pues, tal y como cuenta el propio usuario a través de sus redes sociales, todo comenzaba con un fallo en el sistema GLP de su coche, un Toyota Prius de diez años de antigüedad.

"Empezó a marcar mal el nivel de depósito de GLP. El año pasado dejó de funcionar por completo. Acudí al taller sospechaba que podía ser el sensor del nivel, una pieza relativamente barata. O eso pensaba yo", explica el dueño de este Toyota.

Su sorpresa fue mayúscula al ver el presupuesto realizado por el taller. Y es que los mecánicos no dudaban en cobrarle casi 900 euros por el arreglo completo. Cerca de 500 euros de sensor nuevo, más otros 300 de mano de obra. Algo que provocaba que el presupuesto final alcanzase los 863,67 euros.

"Un amigo se ofreció a repararme el sistema GLP. Tardó menos de media hora. Y era lo que sospechaba, un sensor. Total, la operación hecha por 90 euros".

Una diferencia abismal entre el presupuesto ofrecido por el taller inicial, y el pago que finalmente hizo por el arreglo de su Toyota, que parece muy sencillo de explicar. Al menos, para este usuario.

"Querían cambiar la electroválvula entera, más componentes de los que necesitaba" critica el usuario. Una crítica a la que, además, suma la ineficiencia de los trabajadores del taller. Tanto es así, que llega a dudar de si el presupuesto estaba hecho para que costara el mínimo esfuerzo posible (ya que pagaba el cliente), o si bien, la intención final era "estafar al cliente".

Una queja ante el intento de estafa que no es la única de la que se queja el propietario de este coche. Y es que, debido al mal hacer de este taller, lo cierto es que no ha dudado en echar cuentas del "gasto final". En concreto, 350 euros entre horas perdidas, presupuesto no aceptado, la reparación real, etc.

Experiencia que, sin duda, parece demostrar que un buen mecánico no sólo puede salvar tu coche del desguace, sino también a tu bolsillo de posibles estafas.