Jaguar Land Rover sigue haciendo de las suyas. Las quejas de hoy vienen de la mano de las Islas Canarias. Más concretamente, desde Tenerife. Este propietario de un Jaguar E-Pace acudió al taller oficial con un problema y salió sin poder meter algunas marchas. Sobre lo ocurrido no hay demasiadas explicaciones. Pero las quejas del cliente y el hartazgo con el taller oficial sí se ha dejado notar.
La primera vez que acudió al taller oficial de Tenerife fue, según su relato, por una chapa que protegía un retén que está ubicado en el palier del lado del piloto. Algo que no debería haber sido complicado de reparar. Era un ruido similar al de un cascabel que molestaba al propietario y quiso repararlo. También presentaba algún problema con la TCU porque no podía utilizar funciones multimedia. En total, la reparación de todos estos problemas ascendió a cerca de 700 euros, teniendo en cuenta que el coche no estaba en garantía.
Mes y medio después, el coche sale del taller (con cuatro años de antigüedad y tan solo 30.000 kilómetros) y fue entonces cuando empezó el problema gordo y las acusaciones al taller oficial. Al meterlo en la autopista, se dio cuenta de que a su coche no le entraba ni la tercera ni la sexta marcha. Y para meter la primera, la caja de cambios presentaba más dureza de lo normal.
Tras esto, lo llevó al taller, donde se lo quedaron una semana más. Lo arreglaron aparentemente pero se negaron a explicarle al dueño de este Jaguar qué le había pasado al coche. El cliente se enfadó y les exigió una explicación por escrito por lo que pudiera pasar y para que asumieran que los fallos derivaban de ellos, a lo que le contestaron que se lo darían más adelante por correo electrónico.
De momento, el cliente no ha recibido ninguna explicación de lo que le ocurrió a su coche. Pero la historia no acaba ahí. Tras la presunta reparación, un tiempo después, cogió el Jaguar y se dio cuenta de que el coche literalmente le “escupía” la cuarta marcha, tal y como detalla en un grupo de afectados de Jaguar Land Rover y tal y como ha confirmado a CHASIS CERO. El propio propietario, ante las dudas, indagó en su Jaguar E-Pace para intentar ver qué pasaba. Encontró que le habían doblado el varillaje de la caja de cambios y le habían puesto dos bridas de plástico, una de las cuales se cayó sobre el cubrecarter. El propio cliente deduce que la razón por la que dejó de entrar la cuarta marcha fue cuando esa brida de plástico se partió.
Cuando contactó con el taller, el jefe del mismo no le contestaba a sus dudas y quejas. Al final, consiguió recibir un trato “exquisito” por parte de la recepción que sí contactaron con el jefe de taller. Sin embargo, la respuesta dada por el mismo no fue precisamente clara. Dijo que tenía que llevar el coche al taller otra vez para ver de qué hablaban. En resumen. Llevó el coche a un taller oficial y se lo dejaron más roto de lo que estaba, tal y como detalla el propio cliente.
Ni explicación a las bridas, ni a que se tocara la caja de cambios ni a ninguno de los problemas. Por añadir el colofón, cuando le repararon los problemas de la TCU y de la consola central, se encontró con que le faltaban una buena cantidad de tornillos. La casa oficial de Tenerife no parece que tenga a este cliente demasiado satisfecho, tal y como ha relatado el propietario de este Jaguar F-Pace.
