Qué partes debes mirar en un coche de segunda mano antes de comprarlo

¿No sabes qué revisar en un coche de segunda mano antes de comprarlo? Si ese es tu caso, la guía que te dejamos a continuación te ayudará a evitar posibles problemas.
Qué debes mirar en un coche de segunda mano antes de comprártelo.

En el pasado año, en España se vendieron 2,3 coches de segunda mano por cada automóvil nuevo. Algo que no es de extrañar, debido a que la crisis de los microchips ha provocado listas de espera a la hora de comprar un vehículo nuevo que, en la mayoría de los casos, oscilan entre los 6 meses y un año.

Ante esta situación, el mercado de ocasión se ha convertido en el salvavidas para muchos conductores que necesitan adquirir un coche de forma inmediata. Sin embargo, son muchos los compradores que no saben con certeza qué partes deben revisar al comprar un coche de segunda mano. Si te encuentras en esta situación, vamos arrojar algo de luz sobre los pasos que debes seguir, para que puedas revisar un vehículo usado con éxito.

Pide un informe del vehículo a la DGT

Informe completo de la DGT
Informe completo de la DGT.

Antes de comprar cualquier coche de segunda mano, lo primero que deberías hacer es un chequeo burocrático, para evitar posibles problemas legales. Para ello, la forma más sencilla es solicitar un informe completo de la DGT. Solo cuesta 8,67 euros y es muy útil, ya que en él aparece reflejado si tiene la ITV caducada, carece de seguro o algún tipo de problema legal, como embargos, cargas o la reserva de dominio.

Solicitar el informe de la DGT es bastante sencillo. Solo necesitas la matrícula y puedes hacerlo desde una gestoría (te cobrará entre 10 y 15 euros más el coste del informe); solicitarlo en la sede electrónica de la Dirección General de Tráfico, o bien, a través de su aplicación.

¿Nuestro consejo? Por mucho que te guste, si localizas un coche de segunda mano con cargas, descártalo directamente. Hazlo también si en su historial figura un número de propietarios excesivo en poco tiempo, ya que es un claro indicio de que se trata de un vehículo problemático. Así ahorrarás dolores de cabeza.

 Acude a un taller para revisar coches de segunda mano

Taller GT Automocion
Taller GT Automoción.

Una vez superada la prueba burocrática, si el coche que vas adquirir implica desembolsar una cantidad importante, es importante que acudas a un taller para revisar coches de segunda mano.

Así podrás evitar posibles averías, encontrarte con golpes no declarados y, si lo conectan a un equipo de diagnosis, podrás evitar manipulaciones del cuentakilómetros. Aunque no lo creas, este último punto es muy habitual entre los coches de segunda mano seminuevos. Una comprobación ‘a fondo’ tiene un coste de unos 250 euros, pero es una inversión que merece la pena. 

Si tu presupuesto no te permite acudir a un taller especializado, deberás abrir el capó y revisar tú mismo los elementos clave del coche, que te ayudarán a conocer su estado mecánico. No te preocupes, son pasos muy sencillos.

Comprueba el vaso de expansión

Vaso de expansión con anticongelante en buen estado.
Vaso de expansión con anticongelante en buen estado.

Comprobar el estado del líquido refrigerante es un punto importante a la hora de detectar averías graves. Para ello quita el tapón (hazlo siempre con el motor frío para evitar quemarte) y comprueba si el anticongelante tiene restos de aceite, un aspecto oxidado. De ser así, lo más probable es que el coche haya tenido una avería en la junta de la culata y se haya mezclado el aceite del motor con el líquido anticongelante, por lo que comprarlo sería un error. 

Por otro lado, la presencia de barro en el vaso de expansión, podría indicar que el vehículo ha tenido una fuga de refrigerante y que han utilizado tapaporos para disimularla.

Verifica el estado del aceite

Aceite del motor
Comprobación del nivel de aceite del motor.

Si al revisar un coche de segunda mano detectas que el nivel está bajo, o que su aspecto no es adecuado, podría indicar una posible avería… o que el motor está fatigado por el paso de los kilómetros. Fíjate bien en que el aceite no esté oxidado y tenga olor a quemado, podría ser un síntoma de avería o de que el motor está muy fatigado por el paso de los kilómetros. 

Revisa los neumáticos

Neumáticos del coche.
El neumático no debe presentar desgaste irregular ni deformaciones en el flanco.

A la hora de comprobar los neumáticos de un coche de ocasión, conviene fijarse en varios puntos. El primero es que no presenten un desgaste irregular, que podría ser sinónimo de que las cotas de la suspensión no son correctas o de un golpe mal reparado.

Por otro lado, comprueba que las dimensiones y el índice de carga del neumático, corresponden con las que aparecen en la ficha técnica del vehículo, de lo contrario, no podrás pasar la ITV.

En última instancia, comprobar la fecha de fabricación de los neumáticos no está de más: si compras un coche con 15 años… y las ruedas tienen la misma edad apenas agarrarán y el riesgo de reventón se incrementará considerablemente.

Pasa una ITV voluntaria

Estación de ITV.
Pasar una ITV voluntaria puede ayudar a revisar un coche de segunda mano.

Más allá de las ITV obligatorias, cualquier conductor puede solicitar una ITV voluntaria para su vehículo, algo que puede ser realmente útil a la hora de conocer el estado de un coche usado. 

¿En qué consiste? Básicamente en una revisión en la que comprobarán los mismos elementos que en una ITV convencional: dirección, frenos, neumáticos, emisiones… Si como condición para la compra de un coche de segunda mano le propones al propietario de un coche de ocasión superar una ITV voluntaria y se niega, desconfía de ese vehículo.

Lee detenidamente la garantía del coche

Revisar la garantía es fundamental antes de comprar un coche de segunda mano.
Revisar la garantía es fundamental antes de comprar un coche de segunda mano.

Siempre que revises un coche de segunda mano, conviene no olvidarse de leer detenidamente la garantía y ser consciente de qué averías cubre; ya que en muchas ocasiones las garantías de los coches usados de segunda mano no cubren todos los elementos del coche.

Por último, si acudes a un vendedor de coches de segunda mano profesional, no está de más hacer una pequeña investigación en Google, para ver las reseñas o qué tipo de soluciones da a los clientes cuando hay algún problema.