VOLKSWAGEN

Volkswagen se disculpa con un clienta por pedirle casi 15.000 euros por una avería de poco más de 200

El coche se podría haber reparado por mucho menos dinero.
Ángel Gaitán y Pilar, la propietaria del Volkswagen Phaeton
Ángel Gaitán y Pilar, la propietaria del Volkswagen Phaeton

Hay veces que las cosas se hacen mal en los talleres, pero otras se cometen errores involuntarios que se resuelven de buena manera. Este taller del Grupo Volkswagen ha sido honrado y consecuente por haber cometido un fallo que podría haber costado nada menos que alrededor de 15.000 euros a Pilar, la propietaria de un Volkswagen Phaeton. La buena noticia ha sido que la segunda opinión de Ángel Gaitán ha sido clave para ahorrar una buena cantidad de dinero a la dueña de este coche. Y la otra buena es que Volkswagen ha reconocido el error y se ha disculpado por un fallo en el diagnóstico.

Pilar es clienta asidua de Volkswagen. Todo el mantenimiento lo realizó en taller oficial. Sin embargo, cuando se encendió el testigo de motor y se indicó un problema en el filtro antipartículas, el presupuesto que le vino fue para asustar a cualquiera. Los mecánicos del taller oficial verificaron los fallos y entendieron que la avería solo se solucionaba desembolsando alrededor de 15.000 euros (un presupuesto de 11.700 y otro de algo más de 2.000 euros). El Volswagen Phaeton solo tiene 150.000 kilómetros, pero el abultado presupuesto llevó al hijo de Pilar a pedir una segunda opinión en GT Automoción. Al llegar había dudas de qué le ocurría. Pero lo cierto es que todo se ha solucionado por poco más de 2.000 euros.

El coche ha estado un mes en el taller de Ángel Gaitán. Como decíamos, aparentemente solo tenía encendido el testigo de avería de motor y un fallo en el filtro antipartículas, pero lo cierto es que la avería no era tan compleja como creían en el taller oficial. La solución se ha encontrado por poco más de 2.100 euros, los cuales se reparten entre el gasto en gasoil (desde el taller han verificado el buen funcionamiento del coche durante 1.000 kilómetros), el cambio de una de las dos baterías (punto clave en el fallo que presentaba) y unas mariposas.

Desde el taller oficial entendían que había que abordar una avería compleja. Creían que había que sustituir los inyectores, la bomba, los tubos, los reguladores, la rampa, los retornos, desmontar el depósito… sin embargo no hizo falta tanto trabajo para reparar este impresionante Volkswagen Phaeton. En total, el taller entendía que había que desembolsar en torno a 15.000 euros.

Lo que hicieron desde GT Automoción fue cambiar una batería de las dos que tiene este modelo y esos actuadores (del 2007) que suelen fallar en el vehículo. Si no hubiera tenido que verificar todo lo presupuestado por el taller oficial, la reparación se podría haber quedado en poco más de 200 euros, pero el comprobar todos esos aparentes fallos localizados en el taller oficial elevó el coste.

El error que cometieron desde el taller oficial fue no atender a en qué condiciones se producía el fallo del coche. Cuando la avería saltaba, lo hacía en unas condiciones específicas. En GT Automoción se fijaron en que la batería (una de las dos) estaba por debajo de los 12 voltios, lo que indicaba que podría ser uno de los motivos del fallo. En Volkswagen reconocieron haber sustituido una, pero no las dos. Y al cambiar los actuadores y esa segunda batería todo quedó arreglado. Aún así, Ángel Gaitán también tuvo que comprobar otros componentes del vehículo ya aprovechó para sustituir otros materiales como algunas juntas o la tapa de distribución porque tenía las pestañas rotas. También, para asegurarse, desmontó los inyectores, el filtro de combustible, el regulador de presión de la rampa, el de la bomba y vio que estaba todo impoluto a excepción del filtro.

Tras todo esto, Ángel Gaitán llamó por teléfono al taller oficial y tuvieron un comportamiento ejemplar. Llamaron a la propietaria y se disculparon encarecidamente con ella por un error cometido. El coche nuevo costó más de 70.000 euros y siempre ha sido cuidado en la casa, pero este error podría haberle costado en torno a 15.000 euros. Al final, la segunda opinión le ahorró mucho dinero. Y Volkswagen respondió con elegancia. A seguir trabajando.