Es imprescindible impulsar las ventas de vehículos eléctricos mediante planes eficaces y con incentivos directos al momento de la compra. El plan Moves III ha demostrado ser ineficaz y requiere ser reemplazado por un sistema que otorgue descuentos inmediatos al adquirir estos vehículos.
Wayne Griffiths, presidente de SEAT S.A. y de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), ha sido ratificado para continuar al mando de la asociación. Al iniciar su nuevo mandato, mantuvo reuniones con ministros relacionados con la industria automotriz y, tras estos encuentros con el ministro de Transportes, Óscar Puente, y el ministro de Industria, Jordi Hereu, se vislumbra la implementación de medidas concretas para facilitar la adquisición de vehículos eléctricos e híbridos enchufables.
Durante su gestión previa, se impulsó la electrificación con la aprobación de deducciones fiscales en el IRPF de hasta el 15% (hasta 3.000 euros) para la compra de vehículos electrificados, y la amortización acelerada en el Impuesto de Sociedades, aunque la efectividad de esta última sea discutible.
Para Griffiths, esta legislatura es clave en la transición hacia la movilidad eléctrica. El foco primordial radica en activar efectivamente las ventas de vehículos eléctricos a través de planes operativos y eficientes tanto para compradores como para empresas. Es evidente que el plan Moves III no ha dado los resultados esperados y debe ser sustituido por un nuevo esquema basado en la fiscalidad, otorgando descuentos directos al momento de la compra en lugar de retrasarlos varios meses.
El estímulo fiscal a las empresas es vital para la electrificación del parque automotor y es imprescindible un seguimiento riguroso del despliegue de la red de carga, dado que España está rezagada en comparación con otros países europeos, lo cual resulta determinante para estimular el mercado. Estas cuestiones deben recibir respuestas concretas en el primer trimestre del año, de lo contrario, sería otro año perdido, tal como advierte Griffiths, y deberían formar parte de los Presupuestos Generales del Estado.
Las ventas de vehículos electrificados en 2023 se estiman en 110,000 turismos, un aumento positivo del 40% respecto al año anterior, pero lejos de las expectativas de 190,000 unidades. Es alarmante la gran brecha en comparación con países vecinos, como Portugal o Alemania, que superan el 20%, mientras que en España apenas alcanzamos el 12%.
ANFAC señala la urgencia de adoptar medidas contundentes frente a la baja tasa de electrificación en España, especialmente enfocadas en la infraestructura de recarga, o de lo contrario se llegará tarde. La preocupación también radica en la competitividad en la producción nacional para atraer inversiones a las fábricas españolas. El país es un importante productor de vehículos en Europa y a nivel global, pero si no se venden vehículos eléctricos aquí, las marcas optarán por fabricarlos en otros lugares.
Griffiths recalca que la legislatura actual es crucial para la industria automotriz, determinando su futuro. Para mantener la competitividad y atractivo para las fábricas, el Gobierno debe realizar cambios importantes y urgentes.
