CUPRA

La razón por la que Cupra ha "traicionado" al Grupo Volkswagen y quiere reparar el ruido del sonajero

Cupra ha roto la estrategia del Grupo Volkswagen
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Cupra ha roto la estrategia del Grupo Volkswagen. Al menos en algunos casos de clientes concretos que se hicieron con un vehículo de la marca alemana y se encontraron de frente con el ruido del sonajero en la caja de cambios. Mientras que Audi, Skoda, Seat e incluso Volkswagen responden a sus clientes que es una “característica técnico-constructiva” e insisten en que es normal, Cupra ha roto con esta estrategia por sus propias razones. Y el motivo llama poderosamente la atención.

Es una cuestión de servicio posventa. Hasta ahora, los últimos meses el Grupo Volkswagen ha intentado que los clientes entendieran que la holgura de fábrica que genera ese ruido de sonajero en las cajas de cambios que montan algunos modelos alemanes era normal. Que el coche se fabricó así adrede y que ese ruido que se agrava con el uso era una “característica técnico-constructiva”. Pero hay luz al final de túnel. Lo hay al menos de la mano de Cupra, dadas las últimas informaciones relatadas por los clientes.

Hasta ahora, como decíamos, nadie en el Grupo Volkswagen se había atrevido a reconocer abiertamente que se trataba de un problema endémico. Cuando los clientes acudían al taller oficial por el ruido, se encontraban con el mismo mensaje lanzado por el mecánico: “es una característica técnico-constructiva que no requiere reparación alguna”. Pero Cupra tiene una preocupación por encima de lo normal de su imagen en Internet y en redes sociales y ahora se ha volcado con los clientes. Esta pretensión a nivel de comunicación, el mantener impoluta su imagen en Internet y en redes sociales, ha sido la que ha impulsado a la marca a "traicionar" al Grupo Volkswagen y a ponerse, en principio, del lado de los clientes.

Aquellos que han tirado de redes sociales para denunciar (mencionando a Cupra) que no les atienden para reparar el ruido del sonajero de sus cajas de cambios, han conseguido respuesta en estas últimas semanas. Cupra ha reconocido abiertamente por redes sociales (no en comunicado oficial ni en carta a los clientes propietarios de un Cupra) que hay problemas con las cajas de cambios. Ha reconocido el fallo, la avería y no ha negado que sea endémica. Y por si fuera poco, ha asegurado a sus clientes que están intentando buscar una solución para acabar con este problema que golpea a modelos tanto de Volkswagen como de Cupra, Seat, Skoda o Audi. Es hasta ahora la única marca que ha tomado la decisión de hacerlo.

UNA ESTRATEGIA QUE LLEGA HATA SUIZA

También pasa en Suiza. En el Grupo Volkswagen son perfectamente conscientes de que la caja de cambios de muchos de sus modelos tienen holgura que provoca el ruido de sonajero. Ya contamos desde CHASIS CERO que la marca, lejos de contestar, ha tomado la decisión de decirle a los clientes que es normal, que son “características técnico-constructivas”. Pero no habíamos comprobado que esta estrategia no es solo para los modelos de Audi, Volkswagen, Skoda o Seat (o Cupra) vendidos en España, sino para todos los vendidos en otros países de Europa.

El caso relatado por José Carlos Galán, residente en Suiza, deja claro que los concesionarios oficiales de Cupra y Seat funcionan exactamente igual independientemente del punto geográfico en el que estén. En este caso, es el propietario de un Seat León FR 1.5 TSI con caja de cambios automática DSG. El sonajero le suena a baja velocidades, en primera, segunda y tercera marcha, pero también tiene tirones desde los primeros 25.000 kilómetros. El problema es que con 60.000 kilómetros que tiene el coche ahora mismo, el sonido de sonajero ha empeorado y es mucho más evidente, razón por la que ha decidido acudir repetidas veces al taller.

El afectado asegura que ha ido hasta siete veces al concesionario oficial para ver si le solucionaban la avería, pero lo cierto es que la respuesta del Grupo Volkswagen en general es siempre la misma. También en Suiza. Hasta ahora habíamos visto una buena cantidad de casos en España, donde ya se han formado grupos de afectados y donde ya se está empezando a convertir en un problema para la marca. Pero parece que en Suiza también tienen la misma política de empresa.