Guardia Civil

Tiene un accidente y lo pillan 'pasado' de todo: multiplica por ocho la tasa de alcoholemia y da positivo en cocaína y anfetaminas

El camionero, de 34 años, ha sido detenido
Control de la Guardia Civil
Control de la Guardia Civil

La Guardia Civil ha detenido a un camionero de Sevilla por conducir ebrio y drogado. El hombre, de 34 años, fue sorprendido tras sufrir un accidente con su vehículo tipo hormigonera, en el que multiplicaba por ocho la tasa de alcohol permitida para un conductor profesional.

El siniestro tuvo lugar el pasado sábado en la carretera A-8008 (Sevilla- A-8005). El camionero perdió el control de su vehículo y se salió de la vía, volcando el camión.

Una vez en el lugar del accidente, los agentes de la Guardia Civil sometieron al conductor a las pruebas de alcoholemia y drogas. El resultado de las pruebas fue positivo en ambas. En la prueba de alcoholemia, el camionero arrojó un resultado de 1,17 mg/l en aire espirado en la primera prueba, y 1,27 mg/l en la segunda. Esta tasa es ocho veces superior a la permitida para los conductores profesionales, que es de 0,15 mg/l. En las pruebas de drogas, el camionero dio positivo en cocaína y anfetaminas. Este resultado fue confirmado por el laboratorio de referencia.

A pesar de la aparatosidad del accidente, el conductor resultó ileso. Sin embargo, la vía tuvo que ser cortada y desviado el tráfico por la carretera SE-3102 para poder llevar a cabo las labores de rescate del camión hormigonera.

Este caso pone de manifiesto la importancia de no conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas. Conducir ebrio o drogado es una conducta irresponsable que puede poner en peligro la vida propia y la de los demás.

El caso del camionero sevillano está aún en fase de investigación. La Guardia Civil está pendiente de recibir los resultados de las pruebas de alcoholemia y drogas para poder determinar la responsabilidad del conductor en el accidente.

Si las pruebas confirman que el camionero estaba bajo los efectos del alcohol y las drogas en el momento del accidente, podría enfrentarse a penas de prisión de tres a seis meses, multa de 600 a 3.000 euros y la pérdida del permiso de conducir por un período de seis a doce meses.