En el mundo de la automoción, estamos acostumbrados a escuchar historias sobre la potencia, la velocidad o el diseño de los nuevos modelos. Sin embargo, hoy traemos a nuestra portada una historia que va más allá: la de cómo un Tesla Model Y salvó la vida a su conductor.
Max Pual Franklin, residente en Carolina del Norte (Estados Unidos), vivió una experiencia aterradora a principios de este mes. Mientras conducía su Tesla Model Y, comenzó a sentir los síntomas de un ataque al corazón. En lugar de entrar en pánico o intentar llamar a emergencias (algo que algunos usuarios le han reprochado en redes sociales), Franklin tomó una decisión que le salvaría la vida: activar la función de conducción autónoma de su vehículo.
Desde principios de abril, Tesla permite a todos sus vehículos operar en conducción autónoma total, una tecnología que ha demostrado su valía en este caso. Franklin programó el destino en el hospital más cercano, a unos 21 kilómetros de distancia, y dejó que el Model Y se encargara del resto.
Gracias a la rápida reacción del conductor y a la capacidad del Tesla para conducir de forma autónoma, Franklin llegó al hospital Charles George de Asheville a tiempo para recibir atención médica. Los médicos confirmaron que había sufrido un infarto de gravedad media, pero gracias a la intervención oportuna, se encuentra fuera de peligro y en plena recuperación.
My Crazy True Story
On April 1st, Tesla unlocked Full Self-Driving capability for all Tesla vehicles in America. In a moment of dire need, at 2:00 am the following morning, I found myself grappling with severe dehydration and a blood glucose level of 670 due to a malfunction in… pic.twitter.com/KyePbLiejI— MAXPAUL FRANKLIN (@MAXPAULFRANKLIN) April 10, 2024
Franklin ha querido compartir su historia en redes sociales para agradecer a Tesla y a Elon Musk el trabajo que realizan en el desarrollo de tecnología automotriz. El conductor, que también posee vehículos de otras marcas como Porsche, BMW y Cadillac, afirma que Tesla se encuentra a la vanguardia de la innovación en este sector.
Más allá de un simple medio de transporte, el Tesla Model Y de Franklin se convirtió en un ángel de la guarda, demostrando que la tecnología puede ser un aliado crucial en momentos críticos. Esta historia nos recuerda la importancia de la innovación y el desarrollo responsable en la industria automotriz, donde la seguridad y el bienestar del conductor siempre deben ser la máxima prioridad.
La historia de Max Pual Franklin es un ejemplo de cómo la tecnología puede salvar vidas. Es un recordatorio de que la innovación no solo se trata de crear gadgets o dispositivos, sino de mejorar la vida de las personas.
