Tesla guarda silencio. No quiere dar más explicaciones sobre lo ocurrido pese a que ha perdido un juicio muy mediático contra Ángel Gaitán, propietario de GT Automoción y también de un Tesla mal soldado de fábrica. El recurso de apelación presentado por Tesla ha sido desestimado por el juez. El fabricante norteamericano no estaba conforme con la sentencia y se aferró a que el audio del juicio no se oía bien para intentar echar atrás la sentencia, que daba la razón a Gaitán y condenaba a la compañía de Elon Musk a devolver el dinero del coche al propietario. Ahora Tesla sigue guardando un silencio sepulcral. Ni nota de prensa ni comunicado de ningún tipo.
El problema es que esta sentencia sienta jurisprudencia y perjudica a Tesla, una marca que ha llegado a tener la peor valoración en un informe de JD Power que buscaba la satisfacción del cliente. "Todo el que haya comprado un coche como el mío, que se acoja a la sentencia”, decía el propio Ángel Gaitán tras conocer el resultado del recurso de apelación. Lo cierto es que Tesla se aferró a todo lo que pudo e incluso llegó a declarar ante el juez que ellos no vendían coches de primera categoría, coches premium, pese a que el Tesla de Ángel Gaitán costó nada menos que 62.330 euros.
Pese a todo, Tesla se ha negado a dar cualquier tipo de declaración al respecto pese a que tendrá que devolver el dinero a Gaitán y se verá obligado a ver cómo cualquiera que quiera hacer lo mismo tiene una sentencia en firme sobre la que apoyarse. El silencio de Tesla no es poco, pues Ángel Gaitán no es el único que ha salido insatisfecho con su coche después de habérselo comprado.
La defensa de Gaitán dejó claro que el estado del vehículo que Tesla le vendió “denota una grave falta de fiabilidad, seguridad y calidad”. Esta es la razón por la que quiso recuperar su dinero y devolver el vehículo al fabricante. Algo a lo que Tesla se negó en redondo causando el procedimiento judicial que ha acabado incluso con el pago de una indemnización (muy pequeña) por parte de Tesla al propietario afectado. “Incidencias que en modo alguno puede presentar un vehículo nuevo el día de su entrega. Que surgieron desde el mismo momento de la entrega. Y que fueron reconocidos por la demandada (Tesla) quien tuvo el vehículo en el taller en varias ocasiones”.
El coche venía mal soldado de serie. Pero Tesla no quería aceptar el coche de vuelta y devolverle de paso el dinero a Ángel Gaitán. Lo curioso fue que Tesla se aferrara a un detalle tan absurdo como el audio de la grabación del juicio para intentar invalidar por completo el procedimiento judicial que acabó con una sentencia a favor de Gaitán. "Las grabaciones, salvo en momentos puntuales, fueron dificilmente audibles pero audibles. Y tales dificultades de audición no concretan la indefensión que le causa", reza la sentencia.
