Más radares. En su dinámica habitual, Pere Navarro ha expresado su apoyo a una forma diferente de controlar la velocidad en las carreteras: los radares de tramo. En contraste con los radares fijos, Navarro los considera más equitativos para los conductores que respetan las normas de tráfico. "Nos parecen más justos", ha declarado a la hora de decir que este 2024 llegará acompañado de 88 nuevos radares de tramo.
Durante las jornadas "Somnolencia y conducción" organizadas por el Colegio de Médicos en Cantabria, el director de la DGT anunció un aumento significativo en el número de radares de tramo en 2024. Se planea instalar un total de 88 de estos dispositivos, con uno confirmado para la A-8 en Castro Urdiales.
Navarro explicó que los radares de tramo funcionan midiendo la velocidad media de un vehículo a lo largo de un tramo específico de carretera, en lugar de en un punto fijo. Esto evita frenazos repentinos para cumplir con los límites de velocidad. Una cámara captura el vehículo al ingresar al tramo y nuevamente al salir, calculando el tiempo que se tarda en recorrer la distancia. Si la velocidad media excede el límite permitido, se emite una multa.
La DGT ha mostrado un creciente interés en estos radares debido a su capacidad para controlar de manera más efectiva la velocidad. Esto ha llevado a la eliminación del margen de 20 km/h para adelantar en carreteras secundarias, ya que era incompatible con la implementación de estos dispositivos.
