Land Rover empieza a imitar los problemas de los más grandes. Cualquiera relacionado con el mundo de la mecánica conocerá de sobra los problemas que daban los motores N47 de BMW y Mini con la cadena de distribución.
Pues bien, Land Rover parece haber imitado todo lo malo de estos sistemas que a día de hoy llevan a muchos propietarios a presentar una denuncia en los tribunales contra el fabricante.
El caso de este cliente no solo es llamativo por cuestiones muy trilladas como es la falta de fiabilidad de Land Rover, sino porque la casa oficial le quiso clavar más dinero por lo mismo. ¿Ganan mucho dinero en el grupo inglés por su falta de fiabilidad?
No hay que ser muy ducho en mecánica para adivinar que el problema de este Range Rover Evoque 2.0 diésel de 150 caballos y 64.000 kilómetros que llegó a las manos de autotécnico, un conocido usuario de TikTok cuyo taller está ubicado en Murcia, estaba relacionado con la cadena de distribución.
El problema no es que en Land Rover diagnosticaran mal la avería, dado que esta vez lo hicieron bien. El problema es el dinero que pretendían cobrar por la misma operación.
Muchos dirán que es la mano de obra, pero otros pensarán peor. Sea como sea, la historia de este cliente de Murcia deja claro que no hay que fiarse de los concesionarios oficiales.
@autotecnico Mucho ruido en el motor de este Land Rover Evoque#landrover #landroverevoque #eurotallermurcia #eurotaller #averia ♬ sonido original - Alex
El cliente apreció (tampoco era difícil no hacerlo) que el motor hacía un ruido tremendo al arrancar. El ruido básicamente es la cadena de distribución rozando (cualquiera se lo puede imaginar, pero si no, tiene el vídeo).
Ante las dudas de qué podría pasarle a su coche, lo llevó al taller oficial y ahí le presupuestaron la reparación de la avería en cerca de 7.000 euros.
“Nosotros se lo vamos a hacer por bastante menos igual que el concesionario, con las mismas piezas originales”, detalla el mecánico.
“Hay que armarla gorda”, aclara. Para desmontar la cadena de distribución hay que desmontar buena parte del motor. La mano de obra por este proceso ya es complicada dado que la cadena está ubicada en la parte trasera del motor.
Sea como sea, lo curioso no es que un Land Rover tenga problemas mecánicos (es triste decirlo, pero parece más la norma que otra cosa). Lo curioso es que Land Rover gane dinero con las averías que tanto generan.
En este taller de Murcia tienen claro que pueden reparar la cadena de distribución de este Evoque por “mucho menos” de lo que le piden en el concesionario utilizando exactamente las mismas piezas que utilizarían en el taller oficial.
La diferencia de precio, que asciende a miles de euros, entre un taller y otro se centra en la mano de obra (sí, nada nuevo en el horizonte), pero si tenemos en cuenta que la diferencia es tan abultada en un contexto en el que los Land Rover empiezan a presentar muchas más averías de las que les gustaría a los compradores, el escenario es desolador.
Land Rover quería cobrarle 7.000 euros cuando dentro de ese presupuesto miles de euros son solo mano de obra.
Teniendo en cuenta que el fabricante no ha tenido piedad con un cliente con un Land Rover que presenta fallos gordos y estructurales a los 64.000 kilómetros, miedo da pensar en cuántos han caído en sus redes por pensar que era la mejor opción para reparar sus Land Rover.
Cada vez son más populares estas averías, aunque en este motor concreto, el 2.0 de 150 caballos que montaba el Evoque, entre otros, parece que se ha convertido en religión acudir al taller de forma frecuente. Por cerrar el artículo, aclarar que el cliente hizo todos los mantenimientos en tiempo y forma.
