LAND ROVER

Lleva su Land Rover roto y el taller oficial le pide 18.000 euros (sin mirarlo) o que lo saque del taller

Land Rover Range Rover Evoque
Land Rover Range Rover Evoque

Ya hay jurisprudencia. Existe una sentencia en Gandía que deja claro a Land Rover que debe reparar los motores fuera de garantía porque están mal hechos de fábrica. Al menos en el caso del motor Ingenium. Sin embargo, las historias siguen contándose en los grupos de afectados. 

Un conductor ha decidido tomar medidas legales tras la negativa de la marca Land Rover a reparar su vehículo. El afectado, quien se encuentra sumido en la desesperación (al igual que otros muchos clientes), ha relatado su experiencia en la búsqueda de justicia y apoyo por parte de la compañía.

El incidente tuvo lugar cuando el vehículo del denunciante, mientras circulaba por la autopista, sufrió una avería del motor. Tras llevarlo a un taller de confianza, se descubrió que el motor estaba dañado, especificamente debido a la rotura de la cadena de distribución (algo más típico de lo que parece en este fabricante). El diagnóstico inicial indicó que la reparación tendría un costo exorbitante de 18,000 euros.

Ante esta situación, el afectado buscó el respaldo de la marca, pero se encontró con una respuesta negativa. Land Rover se negó a hacerse cargo de los costos de reparación, instando al denunciante a retirar el vehículo del taller si no planeaba proceder con la reparación en sus instalaciones. Además, se le ofreció una cantidad irrisoria por su vehículo en caso de querer adquirir uno nuevo.

La injusticia percibida por el cliente radica en la falta de investigación por parte de la marca para determinar si la falla fue resultado de un mal uso por parte del propietario o un defecto en el material. La compañía se negó a abrir el motor para una evaluación más detallada, limitándose únicamente a la recomendación de reemplazarlo.

La indignación del afectado se ve agravada por el conocimiento de que no es el único afectado por este problema. Alega que existen múltiples denuncias por la rotura de la cadena de distribución en motores Ingenium fabricados entre 2011 y 2018. Sin embargo, la marca se ha abstenido de emitir un comunicado al respecto, argumentando que el porcentaje de vehículos afectados es mínimo.

Ante esta situación, el denunciante busca ejemplos de sentencias firmes en casos similares para respaldar su demanda. Solicita a aquellos que hayan enfrentado y ganado juicios contra la marca Land Rover por problemas de cadena de distribución que le proporcionen enlaces u información relevante para fortalecer su caso.

En última instancia, el cliente afectado reafirma su determinación de llevar su caso ante los tribunales y luchar hasta el final por lo que considera un trato injusto por parte de la compañía automotriz.