LAND ROVER

Se compra un Land Rover, le presenta 20.000 euros en averías y la marca le regala un termo de café por las molestias

El vídeo que ha dado la vuelta a las redes sociales.
Mireia, la afectada, en el taller de Land Rover
Mireia, la afectada, en el taller de Land Rover.

Esta historia será difícil verla en otros medios de comunicación del mundo del motor. En algunos casos lo tacharán de “caso aislado” y en otros directamente no lo calificarán, pero lo cierto es que el caso de Mireia, su Land Rover y los 20.000 euros en reparaciones que lleva han dado la vuelta a las redes sociales.

No es la primera vez que salen a la luz los problemas que presenta el fabricante inglés, pero desde la marca prefieren no dar declaraciones. Tampoco es la primera vez que se deja ver un titular que habla de que Dacia es más fiable que Land Rover, pero lo cierto es que el fabricante se sigue vendiendo como un “producto de lujo” que se molesta más en tocar tu cartera que en darte alegrías. Vamos entonces con el caso de Mireia.

Es un vídeo corto, pero especialmente contundente. Mireia se compró un Land Rover y acostumbraba a llevarlo a la casa oficial para las revisiones y las reparaciones. El problema es que se ha convertido en la que probablemente sea la mejor clienta de Land Rover (ha pagado casi lo mismo en reparaciones que lo que ahora valdría su coche en el mercado de segunda mano).

Mireia ha tenido que llevar el coche hasta cinco veces a la casa oficial para diferentes reparaciones “graves” que todas superaban las cuatro cifras. En total, esta joven se ha gastado en torno a los 20.000 euros, según sus propias declaraciones en las redes sociales, en arreglar un coche que tiene tan solo 173.000 kilómetros.

El impacto del vídeo ha sido notable en TikTok. El coche lo ha tenido solo durante cuatro años y ha tenido que pisar el taller hasta una vez por año como mínimo. El primer año que lo sacó del concesionario, el coche empezó a dar fallos en algo que se suponía no debía dar.

Se rompió la cadena de distribución, por lo que la reparación empezó a “atracar” la cartera de Mireia. Esta primera avería costó a la propietaria descontenta con Land Rover en torno a los 3.000 euros (más o menos, ya que no ofrece las cifras concretas pese a que asegura tener las facturas en la mano).

@mireia.aierim Que coche me preguntáis que tengo ?? Olvidaros de este ! No recomiendo esta marca para nada ! Más de 60.000€ de coche y se pasa la vida en el taller ! Os leo ! No soy de hablar mal de ninguna marca pero esta ya se pasa #rangeroversport #rangeroverestafa #cochepeordelmercado #horrorrangerover #problemasrangerover #landrover #discoverysport #discoverysportproblema #cochehorrible #perroscoche #perrostiktok #viralperros #perrosviral #cocheviral #cochesestafa #marcaquedesear #perrosviraltiktok #viralrangerover #virallandrover ♬ sonido original - Mireia aierim

La segunda avería no tardó en aparecer, solo que esta vez quiso elevar el tono en cuanto al coste de la reparación. Esta vez se rompió el turbo, estando el coche en un presunto buen estado, y su reparación (que básicamente consistió en cambiarlo) costó en torno a los 6.000 euros, teniendo en cuenta tanto la pieza como la mano de obra.

Tras esto, llegó la mayor “fiesta” para Land Rover. Poco tiempo después directamente se rompió la caja de cambios, lo que llevó a Mireia a pagar nada menos que en torno a los 9.000 euros para repararla. Y lo mejor llega ahora.

Nada más salir del taller, según detalla la denunciante, el coche comenzó a presentar ruidos raros. Llamó por teléfono a Land Rover y le dijeron que lo llevara. Al día siguiente en el taller oficial recibieron el vehículo para decirle que había un problema con el palier, una de las partes de la transmisión de un coche.

En este caso, la avería fue algo más “barata” y se quedó en los 1.000 euros. Pero para que Mireia no estuviera disgustada por el infierno que había pasado, en Land Rover tiraron la casa por la ventana para regalarle un pequeño termo de café. “No te ayudan, no te dicen nada y no se hacen responsables de nada”, detalla. Pero ese termo de café ha llegado al corazón de Mireia… o no.