En muchas ocasiones, la elección de un coche en concreto se hace, no sólo por el precio, sino también por la confianza que la marca oficial da al cliente. Y es que confiar en el servicio al cliente es una de las razones más comunes por las que desechar una opción de vehículo, siendo muchos los que se guían por sus preferencias en este sentido antes de adquirir a un nuevo amigo de cuatro ruedas. Sin embargo, parece que no siempre la marca es garantía de confianza. Así pues, en ocasiones, los servicios oficiales acaban siendo igual de problemáticos que los talleres "no-oficiales", haciendo que muchos sean los que dudan de si merece o no la pena confiar en la marca.
Una cuestión que ahora parece afectar a Toyota. Al menos, en lo que se refiere a uno de los talleres oficiales que el conocido grupo automovilístico tiene en Madrid, que ha sido señalado por un usuario anónimo a Chasis Cero, para denunciar la situación que tuvo que vivir a este respecto. Y es que, lejos de conseguir una solución rápida y sencilla para su vehículo, el propietario de este Toyota tuvo que pasar un verdadero "calvario" en el taller oficial, hasta que tomó la decisión de acudir a un taller fuera del servicio oficial.
Todo comenzaba cuando el propietario del coche decidía acudir al taller oficial para pasar una revisión rutinaria al vehículo en cuestión. Un paso previo a las vacaciones, así como a la obligada cita anual (en el caso de este coche) con la ITV. Visita al taller Toyota ante el que los mecánicos encontraron varios detalles a arreglar en el coche. Entre ellos, los faros delanteros que, debido al tiempo y al uso, estaban opacos, lo que haría que el coche no conseguiría pasar el control de la ITV.
Unos faros que suponían un verdadero problema para el coche de este propietario: y es que, según el taller oficial, ya no se estaban fabricando piezas para este vehículo en concreto, por lo que sólo quedaba la opción de acudir a los desguaces y buscar unos faros que se pudiesen adaptar al Toyota, y que estuviesen en buenas condiciones. Y es que, según el taller oficial, limar los faros "no sería suficiente" para conseguir devolverles su antiguo brillo.
UN TALLER NO OFICIAL ENCUENTRA LA "SOLUCIÓN"
Diagnóstico del taller oficial ante la que los dueños de este Toyota, en perfecto funcionamiento a nivel motor, no dudaban en movilizarse para encontrar unos faros aceptables para su coche. Una tarea nada sencilla, ya que, al tener el coche más de diez años, pocos son los ejemplares que llegaban a desguace y que fuesen aptos para la sustitución de las piezas.
Ante las muchas complicaciones, la pareja no dudaba en acudir a otro taller, en esta ocasión no oficial, para buscar una posible solución a los faros originales del vehículo, sin ninguna esperanza de conseguir solventarlo. Al menos, a tiempo para pasar la ITV sin ser multados por retraso. Y su sorpresa fue mayúscula cuando recibieron el diagnóstico del segundo taller: el único problema de los faros, es que estaban sucios en el interior.
Así pues, apenas unas horas después de haber entregado el coche en el taller no oficial, los propietarios de este Toyota recuperaban su coche en perfectas condiciones, con los faros perfectamente transparentes.... y limpios. Y poco después, la ITV era favorable para este coche, apto para poder circular un año más por las carreteras españolas. "No nos lo podíamos creer" aseguran los dueños del coche a Chasis Cero.
Un caso que, sin duda, parece demostrar que, a pesar de la gran confianza que Toyota da a sus clientes, y que la han convertido en una de las marcas más vendidas, lo cierto es que no siempre los talleres oficiales parecen responder a esta garantía de la marca en cuanto a la atención a sus clientes, y a la búsqueda de la mejor solución para cada coche.
