Surrealista

Intenta vender su Mercedes-AMG en una subasta y acaba pagando 4.000 euros por llevárselo de vuelta

Le salió muy mal la jugada
Mercedes-AMG G 63
Mercedes-AMG G 63

En España, no es una práctica común vender tu coche en una subasta en línea, pero en otros países es una forma habitual de encontrar compradores. Sin embargo, lo que le sucedió a un propietario de un Mercedes-AMG Clase G 63 es una historia que desafía la lógica y está llena de surrealismo: terminó pujando por su propio vehículo. 

El protagonista de esta historia decidió poner su imponente Mercedes-AMG Clase G 63 a la venta en Bring A Trailer (BaT), un sitio web especializado en subastas de vehículos. Esta versión es la más potente de la gama Mercedes Clase G, un todoterreno de lujo que se destaca por su precio inicial en España de 216.854.47 euros y su motor V8 de cuatro litros que genera 585 CV. Es una bestia todoterreno con inyección directa, dos turbocompresores y un sistema de desconexión de cilindros.

Bring A Trailer, como cualquier casa de subastas, cobra una comisión por vender un coche en su plataforma. En este caso, es un 5% del precio de venta final. Por ejemplo, si el vehículo se vende por 100.000 euros, el comprador tendría que pagar 105.000 euros en total, ya que los 5.000 euros adicionales son la comisión de la plataforma.

Sin embargo, aquí es donde entra en juego una práctica poco ética conocida como "shill bidding" o puja cómplice. Esta táctica implica que alguien, a menudo el propio vendedor o alguien cercano a él, realice pujas falsas para aumentar artificialmente el precio del artículo subastado, aumentar su atractivo o mejorar su posición en las búsquedas.

En el caso del Mercedes-AMG Clase G 63, tanto un amigo del propietario como el propietario mismo participaron en esta puja cómplice. El propietario inicialmente le pidió a Doug Tabbutt, de SwitchCars, que llevara a cabo la operación de venta en esta casa de subastas y estableciera un precio mínimo de 90.000 dólares (84.595 euros al cambio actual) para vender su coche.

Para conseguir inflar el precio de su vehículo, el propietario realizó una oferta de 86.000 dólares (80.836 euros) con el fin de aumentar artificialmente el precio del coche. Este precio, sumando el 5% de comisión, superaba el precio inicial que había marcado el dueño de este Mercedes, por lo que la empresa de subastas consideró que, a partir de ahí, el coche ya estaba vendido.

Sin embargo, todo salió mal para el propietario del Mercedes-AMG Clase G 63 ya que nadie superó su oferta de 86.000 dólares. Como resultado, tuvo que abonar 4.300 dólares (4.041.81 euros), es decir, el 5% de la venta, a la plataforma de subastas por un coche que ya era suyo.

Ante esta surrealista situación, el vendedor trató de solucionar el problema. Se puso en contacto nuevamente con Doug Tabbutt y le pidió que contactara a las otras personas que habían realizado ofertas para completar la venta correctamente. Fue entonces cuando confesó que uno de los ofertantes era su amigo.

Doug Tabbutt se negó a ayudar y se puso del lado de Bring A Trailer, considerando que la práctica de la puja cómplice no era ética. Este extraño episodio destaca la importancia de mantener la honestidad y la integridad en las transacciones de subastas en línea, incluso cuando se trata de vender tu propio automóvil.