Nadie entiende muy bien por qué, pero Land Rover no tiene algunos componentes de motor de algunos modelos relativamente modernos. En este caso, hablamos de unos tacos de motor del Land Rover Discovery del año 2008. Tiene diez años, sí.
Pero no deja de ser raro que el propietario de un Discovery de esta antigüedad acuda a un taller y no sea capaz de encontrar los soportes de motor.
No es raro tampoco que en un coche de estas características (un todoterreno reconocido por todos los amantes del motor) tenga que cambiar los tacos de motor llevado un tiempo, más si se ha hecho off-road, pero Land Rover no dispone de stock de este componente. El cliente tiene que ir a buscarse la vida en el mercado de segunda mano y en los desguaces. No tiene más salidas.
Este es uno de los problemas con los que se han encontrado en GT Automoción, pero que también tienen todos los talleres habidos y por haber.
Recurrir a la marca para comprar unos tacos de motor nuevos es imposible porque ya no se fabrican, pese a que la normativa obligue a mantener los recambios de los modelos durante un periodo de tiempo prudencial.
Es cierto que hay plataformas en Internet a través de las cuales se pueden comprar tacos de motor que podrían hacer el apaño, o al menos es lo que prometen en su página web, pero el recambio oficial fabricado por Land Rover, y el recomendado, ya no se encuentra porque la marca dice que no tiene stock disponible.
No es difícil que Internet te ofrezca una amalgama de opciones. Sin embargo, hacer las cosas por la vía oficial no parece una solución, al igual que Land Rover tampoco tiene demasiada intención de reparar esta falta de stock para todos aquellos que tengan un Discovery con diez años de antigüedad.
Lo que hay que tener también en cuenta es que Land Rover no solo no fabrica los tacos de motor de los modelos del 2008. Este es solo el ejemplo que han tenido desde GT Automoción para darse cuenta de que no se fabrican los soportes de motor de unos modelos que se mantuvieron durante varios años.
Concretamente, hablamos del Discovery que se empezó a sacar a la venta en 2004 y se mantuvo hasta 2009. Después de estas fechas, llegó el nuevo modelo.
Land Rover es una marca que no está pasando por un buen momento, precisamente. Ahora mismo, los directivos viven entre rumores de “cierre” que parecen un poco exagerados pero que elevan la tensión considerablemente en las filas del fabricante inglés.
Las ventas literalmente se han desplomado a niveles nunca antes vistos y la fiabilidad de sus motores no es precisamente la deseada por la propia marca.
Con todo esto, que sigan surgiendo problemas que afectan a modelos que todavía mantenían el tipo en cuanto a fiabilidad mecánica se refiere no parece una buena noticia para el fabricante. Sea como sea, lo cierto es que la sensibilidad entre los directivos está tan elevada que incluso han llegado a recibir cartas de la sede central en Whitley.
Los problemas, según cuentan fuentes de la marca inglesa, han crecido considerablemente desde que la india Tata Motors comprara por 2.300 millones de dólares, nada menos.
Esta compra que se produjo en junio de 2008 no ha evolucionado precisamente bien para los intereses de una marca histórica que precisamente pasó a la historia por modelos irrompibles como el Defender que funcionaban hasta con otro tipo de combustible, tal y como ha relatado un mecánico experto a CHASIS CERO.
Ahora los problemas son otros y tienen que afrontarlos con entereza, pero mal vamos si no tienen ni componentes de coches o modelos con diez años de antigüedad.
