Imagina que compras un cable o una cuerda lo suficientemente resistente como para aguantar el empuje de los coches con más par motor del mercado. Y ahora imagina que te aburres lo suficiente como para montar una competición inspirada en ese juego de la cuerda de cuando éramos niños (y niñas, no se enfaden en el Ministerio de Igualdad) que también se hizo popular con esa serie de Netflix llamada “El Juego del Calamar”.
Los contendientes elegidos han sido el Toyota Land Cruiser y el Ford Ranger Raptor. Y el resultado tiene un claro vencedor, aunque si se tiene en cuenta la potencia de cada uno no debería de sorprender a nadie quién se lleva la palma en esta batalla tan curiosa.
Hablamos de dos bestias que en su versión más potente ofrecen una buena cantidad de caballos, aunque el Toyota se queda bastante corto en comparación con el Ford Ranger Raptor. El coche nipón tiene 204 caballos en un motor de cuatro cilindros completamente abocado al mundo off-road.
La Ford Ranger Raptor es bastante más potente que su contendiente en esta batalla. Ofrece 292 caballos de potencia. Si nos metemos con otros temas, desde luego el resultado podría haber cambiado, especialmente las ruedas que monte cada coche.
En cualquier caso, el resultado es que hay un claro ganador: la Ford Ranger Raptor arrastra al Toyota Land Cruiser mientras las cuatro ruedas de éste chillan desesperadas por intentar avanzar hacia adelante.
La buena noticia es que el cable que han comprado para esta contienda aguanta el tipo mientras cada una de estas bestias tira hacia adelante. No es El Juego del Calamar y no hay una caída en el centro, pero sí que deja claro que en cuando a potencia se refiere la tracción no lo tiene todo que decir. La Raptor tiene mejor agarre y más potencia como para arrastrar a su competidor japonés.
